WORMWOOD
Agentes estupefacientes
En la última década, los creadores de series han cogido el habito de hablar sobre la idiosincrasia de una América empoderada. Algunas critican ciertos comportamientos sociales, como el sexismo o la homofobia, como hacen en Mad Men (Matthew Weiner, 2007-2015) mientras que otras se atreven a ahondar en la política oculta de su propio país. Errol Morris, firma inconfundible en el ámbito documental contemporáneo, ya lo mostraba en varias de sus obras como Tabloid (2010) o Rumores de guerra (2003). Con Wormwood (2017) trata de filmar otro retrato sobre un país metido hasta el cuello en cuestiones neo-imperialistas durante la Guerra Fría, que trajo consigo nuevos métodos para adiestrar a las fuerzas de seguridad. Esta historia narra, en particular, la muerte del agente de la CIA Frank Olson en seis partes a modo de miniserie.
Desde el principio vemos cmo Olson (Peter Sarsgaard) cae por los aires desde un hotel de Manhattan en 1953, mientras los créditos iniciales se suceden con una suavidad contradictoria. Segundos de calma que nos invitan a preguntarnos desde el comienzo quién es ese hombre que se desvanece cayendo al vacío. Eric, hijo del agente y protagonista del documental, cuenta capítulo por capítulo la historia de cómo su padre fue testado por la CIA mediante experimentos con LSD. Un secreto de estado que en los años 70 se desvelaría, causando estupor entre la opinión pública y convirtiéndose en la razón primordial por la que su hijo se prestó a la investigación y para buscar justicia.
Si por algo llama la atención Wormwood es por su formato. Nos ofrece, por un lado, una lectura neo-noir de los hechos, con una estética fincheriana que a veces recuerda a una versión menos oficialista y más oscura que House of Cards (Beau Willimon, 2013). Por otro lado, cuenta con una gran fuente de archivos audiovisuales que le otorga la faceta documental propia en el director. Es una historia basada en un hecho real, al fin y al cabo, y Morris decide recrear los hechos mediante una perspectiva acorde a los testimonios de Eric Olson.
Nada se sabe en el transcurso del documental. Hay dudas sobre si fue un suicidio bajo los efectos del LSD o bien un asesinato. Esto se maneja con un montaje frenético, confuso y lírico. Los documentos que prueban la muerte de Olson, los recuerdos de un hijo desamparado por la falta de un padre en su vida y la manera de mostrar la realidad a partir de la pantalla partida nos muestran la evolución y la incertidumbre de un caso que, hasta los años 90, no se resolvería.
Sin duda es un documental ambicioso, cargado de razones para ser expuesto. Morris pretende desmantelar los trapos sucios de un sistema político llevado por el afán de poder. Un discurso sobre las sombras de un país inimaginablemente turbio. No obstante, falla en la ejecución. Al no haber una linealidad temporal en la historia hace que volvamos al punto de partida sin avanzar en el transcurso de lo ocurrido. No será hasta el cuarto capítulo cuando veamos una vuelta de tuerca en la narración y pongamos en duda la naturaleza de su muerte. Divagar en la ficción que Morris propone resta credibilidad a la propia realidad de Eric Olson. Incidir en los momentos de sentimentalismo patriótico en la búsqueda de la justicia, también. Aunque sería imposible negar la valentía del director en plasmar la historia de la CIA y las drogas, la película acaba pecando de un excesivo respeto por los hechos que hace que no funcione ni la parte ficcional ni se llegue a profundizar en la histórica. Wormwood es el comedero de cabeza de un hijo trastornado por su pasado, con verdadera ansia de mostrar a la sociedad la verdad, convertido por su director en una docuserie destartalada que pide a gritos una reforma.
Wormwood (Estados Unidos, 2017)
Dirección: Errol Morris / Guion: Steven Hathaway, Molly Rokosz / Producción: Adam Del Deo, Peter Friedlander, Lisa Nishimura, Errol Morris, Robert Fernández, Caroline Baron / Música: Paul Leonard-Morgan / Fotografía: Igor Martinovic, Ellen Kuras / Reparto: Peter Sarsgaard, Adina Verson, Bob Balaban, Molly Parker, Christian Camargo, Michael Chernus, John Doman, Hillary Gardner, Chance Kelly, Tim Blake Nelson, Jack O’Connell, Scott Shepherd, Jimmi Simpson.
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