HALLOWEEN KILLS
La penúltima puñalada del terror
De las franquicias que más han sabido y podido soportar el peso de la fatiga tras múltiples entregas, la única que ha sobrevivido a la segunda década del siglo veintiuno ha sido Halloween. Otras licencias de terror, monstruos populares y películas slasher han sido devoradas, y subsecuentemente abandonadas, por una fiebre de remakes dosmileros. Algunos de los pocos ejemplos que podrían salvarse de esa etapa serían el Viernes 13 (2009) o La Matanza de Texas (2003), ambas de Marcus Nispel, pero desde entonces poco o nada se ha visto de las respectivas marcas.
Es una dirección segura por la que llevar licencias de semejante calibre. Una vez se ha llegado ya a un número considerable de entregas, y en las que se empiezan a plantear viajes al espacio, o regresos al futuro, modernizar y volver a empezar puede ser hasta refrescante para traerse ideas pretéritas y elaborarlas en un marco presente. Halloween: H20 (Steve Miner, 1998) no deja de ser un calco de Scream (Wes Craven, 1996), y consiguió secuela: Halloween Resurrection (Rick Rosenthal, 2002). Lo mismo se puede decir de la versión de Rob Zombie -y por alusiones- de las nuevas y “definitivas” secuelas de David Gordon Green.
Hay algo en esta franquicia que funciona mejor que la mayoría de los sospechosos habituales del subgénero, a pesar de ser de las más antipáticas. Halloween es un terror de palomitas y cerveza, es la peli que ponen en la fiesta al final de Scream, y la única que aún a día de hoy sigue siendo la impepinable reina del slasher comercial, a pesar de no tener nunca del todo claro hacia dónde van a ir a parar los muchos reboots que ha sufrido la marca. .
Halloween Kills (David Gordon Green, 2021) sigue la línea general de las secuelas, y se recrea en ella. Sería imprudente decir que es una película que no sabe lo trilladísima que está la premisa, porque es lo más obvio que se podría hacer con semejante historial: ignorar el cansinismo de una serie que ya roza le edad de jubilación y probar con nuevos horizontes. En cambio, convive en ese espacio seguro, reconocible, que es volver a flashbacks y continuar exactamente donde lo dejó la anterior película. De nuevo, poco reprochable teniendo en cuenta que esa fue exactamente la misma estrategia que usó la segunda parte original, Halloween II: Sanguinario (Rick Rosenthal, 1981).
Para ser la que se ha popularizado por ser una versión descafeinada de Michael Myers, es quizás la película en la que más protagonismo se le ha dado (desde las de Zombie). Si la anterior fue dedicada a Laurie, Kills es la platea en la Michel se desvive. La película son los momentos en los que las muertes empiezan a rozar lo cómico de lo exageradas que se vuelven, y lo imparable del alboroto. Por suerte, estos momentos son numerosos, suculentos, y cada vez más bombásticos. Y menos mal, porque buscando fuera de esas escenas, uno puede encontrarse con una torpe y algo vergonzosa turba enfurecida, y una nieta Strode que tenía que haberse quedado en la anterior entrega.
Todo ello acompañado de una música que es machacona, rabiosa, legendaria. Hay algo de alucinante en pensar que uno de los reclamos de la del 2018 fue la banda sonora de John Carpenter, y no solo teniendo el mismo compositor, sino contando con unas composiciones aún mejores, es extraño que para la secuela no se haya anunciado tanto. Carpenter siempre ha sido muy claro con su relación con la saga, y con lo desprendido que es, alegra ver que aún tiene pasión por su creación. Ese sentimiento de leyenda se transmite, en gran medida, a través de la música. Los personajes insisten mucho en la trascendencia de Myers, pero no es hasta que suenan las canciones que acompañan a cada muerte que de verdad uno empieza a sentir la mitificación del monstruo que se está intentando conseguir.
Halloween persistirá más allá del supuesto final que supondrá Halloween Ends (David Gordon Green, 2022) el año que viene. Si ha funcionado ya tres veces (o cuatro, según se mire), siempre se podrá apuñalar en Haddonfield una penúltima vez más. Igual que su asesino, Halloween parece no querer morir, jamás.
Halloween Kills (Estados Unidos, 2021)
Dirección: David Gordon Green / Guion: Scott Teems, Danny McBride, David Gordon Green / Producción: Malek Akkad, Laura Altmann, Jason Blum, John Carpenter, Jaime Lee Curtis / Fotografía: Michael Simmonds / Música: John Carpenter, Cody Carpenter, Daniel A. Davies / Montaje: Timothy Alverson / Reparto: Jamie Lee Curtis, Judy Greer, Andi Matichak, James Jude Courtney, Nick Castle, Will Patton, Thoman Mann, Scott McArthur, Michael McDonald