BREATHE
Las no libres
“Aquí no tienes dignidad de nada, ni tampoco intimidad. ¿Qué intimidad tienes si siempre estás con una compañera? Si, por ejemplo, yo me quiero hacer una paja qué intimidad tengo. Me tengo que esperar hasta que la compañera se duerma, pero si me duermo yo antes ya no me puedo hacer la paja”. Este es el testimonio de una de las internas del centro penitenciario Brians 1, protagonistas de Breathe, un documental dirigido por la directora y creadora escénica Susanna Barranco. Con su nueva obra, Barranco pretende derribar tópicos del cine carcelario (como sentencia una de las presas) y mostrar al espectador el día a día de estas mujeres, su relación entre ellas y con la prisión, así como escuchar sus confesiones más personales, cómo era su vida antes de la cárcel y sus esperanzas una vez hayan salido.
Para alcanzar dicho objetivo Breathe acerca sin pudor la cámara hasta las internas para dotar de cercanía sus reflexiones, sus miedos y sus anhelos, moviéndose además por los pequeños espacios de la prisión donde viven. De esta forma se muestran sus habitaciones, sus camas, sus baños, y otras zonas comunes como el gimnasio, la consulta médica, la escuela o el patio, lugar este último donde conversan, bailan y cantan. Conjuntamente, se insertan pequeñas piezas escénicas que dichas mujeres interpretan en un teatro del centro penitenciario, bien para contarnos las causas de su reclusión (desde tráfico de drogas hasta delitos de estafa pasando por agresiones físicas), o bien para sincerarse y expresar sus sentimientos. En las escenas donde se recogen las confidencias más íntimas Barranco abandona el color y las filma en blanco y negro.
Paula, Thalita, Delia, Mª Isabel, Alba, Pilar y Sílvia son las siete mujeres internas que protagonizan Breathe, aunque será una de ellas la que cobre más protagonismo que las demás. Discutible decisión teniendo en cuenta que hay historias con mayor interés que quedan en segundo plano en los algo excesivos 92 minutos de metraje. La autora de obras como El silencio de Jonc (2013) o De rodillas corazón (2018) aprovecha las declaraciones y conversaciones de estas internas para exponer temas como la violencia de género, la desestructuración familiar, la prostitución y la enfermedad mental.
Al final, se trata de dar voz a las que no la tienen, a las no libres, a las no percibidas. Colocar el foco y el micrófono delante de personas marginadas por la sociedad, las olvidadas, en este caso las reclusas, aquellas que el verbo respirar lo conjugan en pasado o en futuro, pero pocas veces en presente. Como dice la cita de Simone Weil con la que se abre el filme: “a los desdichados no se les escucha. Están en el estado en que se encontraría alguien a quien le hubieran cortado la lengua y que por momentos olvidara su lesión. Sus labios se agitan y ningún sonido llega a sus oídos. Rápidamente se vuelven inútiles para el uso del lenguaje debido a la certidumbre de no ser escuchados”.
Breathe (España, 2021)
Dirección: Susanna Barranco / Guion: Susanna Barranco / Producción: La Barranco Films / Música: Amat Mira Barranco / Fotografía: Christian Guiriguet, Susanna Barranco / Reparto: Paula, Thalita, Delia, Mª Isabel, Alba, Pilar, Sílvia.